No es tarea fácil elegir alcachofas, simplemente porque las hojas tienen que estar verdemente frescas y no marrónmente arrugadas y secas. Eso lo recordé mientras raspaba el pan recién rescatado del tostador, el olor a quemado me recordó mi breve estadía en el sur, en las tardes que pasamos frente a la cocina a leña comiendo, comiendo, comiendo, cuando se suponía que sólo teníamos que trabajar, trabajar, trabajar y fue lo que menos hicimos. Por eso abandoné ese proyecto, porque cuando me sumé a él primeramente y ayudé a desmalezar en las plantaciones en terrazas, conocí a los padres de Abrahám, el cual había fallecido recientemente aplastado por un muro en el terremoto. Y no me olvidaré que José se refería con el mismo nombre al nuevo hijo que venía, como si Abrahám fuese reemplazable, como si sólo por vivir en un territorio extremo no tuviese esa familia los mismos sentimientos que ella en plena centralización. Pero ellos sabían más que eso, y ni siquiera necesitaron hacer mi asociación, la tenían incorporada, las palabras sonaron vacías.
sábado, 11 de octubre de 2008
viernes, 10 de octubre de 2008
Un absurdo que no tiene sentido me está robando horas de sueño... Es absurdo
No la entiendo, definitivamente no la entiendo. Me doy por vencido, creo que no soy capaz de entender a nadie.
Hoy tenía hambre, y teniendo poco dinero, quise comprar un chocolate de 100 sestercios. La señora me dijo que costaban 200 sestercios. Yo sabía que en todos los demás negocios - a pocos pasos -, los vendían a 100 sestercios. Aparenté no sorprenderme, temí que mis gestos torpes me delataran. Pagué los 200 sestercios, y me avergoncé de mí mismo.
No... no entiendo.
Hoy tenía hambre, y teniendo poco dinero, quise comprar un chocolate de 100 sestercios. La señora me dijo que costaban 200 sestercios. Yo sabía que en todos los demás negocios - a pocos pasos -, los vendían a 100 sestercios. Aparenté no sorprenderme, temí que mis gestos torpes me delataran. Pagué los 200 sestercios, y me avergoncé de mí mismo.
No... no entiendo.
Mal de horario.
Me molestaría muchísimo si me reconocieran por mis malos hábitos al ingresar a un salón, y siempre hemos de saber cuándo Juan ha ingresado a un salón por sus malos hábitos.
No me molestaría que pasase completamente desapercibido y sé que tampoco a los demás.
Me gustaría más reconocerle por sus zapatillas de cordones rojos.
O por su voz cuando dice "no hay problema".
No me molestaría que pasase completamente desapercibido y sé que tampoco a los demás.
Me gustaría más reconocerle por sus zapatillas de cordones rojos.
O por su voz cuando dice "no hay problema".
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